1
¡Me he alejado tanto y tan lejos de Ti!
¿Hasta dónde me lo permitirás?
Aunque Te ocultes de mis dos ojos en lo invisible,
mi corazón observa Tu amanecer,
desde lejos
2
Primero el recogimiento, después el silencio.
Más tarde la afasia y el conocimiento,
después el descubrimiento
y, por último, la desnudez.
3
A partir de ahora
entre Dios y yo no hay más explicaciones intermedias,
ni demostraciones ni milagros para convencerme.
4
...y los fuertes, a medida que se enamoran, se hacen humildes.
5
¿Cuál es la tierra tan vacía de Ti
para que ellos se yergan buscándote en los cielos?
Y Tú les ves que miran aparentemente hacia Ti,
pero no Te perciben,
en su ceguera.
6
He visto a mi Señor con el ojo del corazón
y Le he dicho: ¿Quién eres?
Él me dijo: "Tú".
¡Para Ti no existe el dónde,
no hay dónde cuando se trata de Ti!
¡La imaginación no tiene imágenes procedentes de Ti
que le permitan acercarse allí donde Tú estás!
Si Tú eres Aquel que abarca todos los lugares
e incluso el más allá del lugar
¿dónde estás Tú en realidad?
7
La oración es la perla mediana que Te oculta a mis ojos
cuando mi pensamiento se deja ceñir por mi atención.
8
El éxtasis es una incitación,
una mirada de Dios que crece y se inflama en las conciencias.
9
El pacto de la misión profética es como una antorcha de luz divina,
cuya empuñadura está oculta en el interior del corazón.
Gracias a Dios, el aliento del Espíritu increado
insufla en mi corazón un pensamiento:
el que Israfil insuflará en la Trompeta.
10
Reniego Tu orden
pero con el fin de que Tu santidad sea proclamada,
y mi razón, descentrada, dance alrededor de Ti.
11
...y Te has escondido en Tu creación.
A veces surges para los corazones de Occidente
y a veces desapareces para los corazones en Oriente.
12
...Algunos van en procesión alrededor del Templo,
sin estar corporalmente allí,
ya que hacen su procesión alrededor de Dios,
y Él les ha dispensado del Haram.
13
Eres tú quien ocultas a tu corazón
la intimidad de su misterio
y, si no fuera por ti,
tu corazón no estaría sellado.
14
¡Ah! ¿Soy yo, eres Tú?
Ello haría dos dioses.
Lejos está de mí el pensamiento de afirmar "dos"!
15
Dios me ha hablado desde el fondo de mi corazón,
y la ciencia se ha formado en mis labios.
Me he acercado a Él, yo que tan lejos estaba de Él,
y Él me ha hecho Su íntimo y Su elegido.
16
No me queda ningún átomo,
ni en el corazón ni en las entrañas,
con el que yo no Le comprenda,
y con el que Él no me comprenda.
17
Eres mi corazón y mi espíritu,
mi conciencia y mi inspiración,
el ritmo de mi aliento,
el nudo de mi organismo.
18
¡Oh Tú que eres la Reunión del todo,
ya no eres "otro" para mí,
sino que eres "yo mismo".
¿Qué excusa podría presentarme a mí mismo?
19
Tu imagen está en mis ojos,
Tu memoria en mis labios,
Tu morada en mi corazón,
pero
¿dónde Te ocultas?
20
He renegado del culto debido a Dios
ya que esta negación me era un deber,
mientras que para los musulmanes
es un pecado.
21
Fui exuberante en la felicidad de amar
y heme aquí, ahora,
afectado por el castigo de la exuberancia.
22
Yo soy la verdad.
--- Husayn Mansûr Hallâdj. "Poemas de amor divino. Poemario sufí". Traducción de Francisco Villalba. Madrid: Miraguano Ediciones, 2004. 2a edición. 92 pp.
Comments