Movimientos
Henri Michaux
Contra los alvéolos
contra la cola
la cola unos y otros
lo dulce unos y otros
¡Cactus!
Llamas de lo negro
impetuosas
madres de las dagas
raíces de las batallas arrojándose en el llano
Carrera que repta
deslizamiento que vuelve
unidad que hormiguea
bloque que danza
Un defenestrado por fin alza el vuelo
un arrancado de abajo a arriba
un arrancado de todas partes
un arrancado nunca más atado
Hombre apuntalado
hombre al salto
hombre despeñándose
hombre para la operación relámpago
para la operación tempestad
para la operación jabalina
para la operación arpón
para la operación tiburón
para la operación desgarramiento
Hombre no por la carne
sino por el vacío y el mal y las llamas intestinas
y los arrebatos y las descargas nerviosas
y los reveses
y los regresos
y la rabia
y el descuartizamiento
y el enmarañamiento
y el despegue entre las chispas
Hombre no por el abdomen y las placas glúteas
sino por sus corrientes, su debilidad que se restablece
en los shocks
sus arranques
hombre por la luna y el polvo quemante y la kermesse
en sí del movimiento de los otros
por la borrasca y el caos jamás ordenado
hombre, empavesado, flameando al viento
murmurador de sus pulsiones
hombre que apalea al loro
que no tiene articulaciones
que no cría ganado
hombre-chivo
hombre con crestas
con espinas,
en escorzos
hombre con copete, galvanizando sus andrajos
hombre con apoyos secretos, irrumpiendo lejos de su
envilecedora vida
Deseo que ladra en lo negro es la forma
multiforme de ser
Impulso en tijeras
en horquillas
impulsos irradiados
impulsos sobre toda la Rosa de los vientos
Al estrépito
al rugido, si se le diera un cuerpo…
A los sonidos del címbalo, a la barrenadora
a los pataleos adolescentes que no saben aún
lo que quiere su pecho que está como
si fuera a estallar
a los tirones, a los gruñidos, a los rompimientos
a las mareas de sangre en el corazón
a la sed
a la sed sobre todo
a la sed jamás aplacada
si se le diera un cuerpo…
Alma del lazo
del alga
del cric, del ancla y de la ola que se alza
del gavilán, de la morsa, del elefante marino
alma triple
descentrada
energúmena
alma de larva electrizada que viene a morder
a la superficie
alma de los mordiscos y rechinamientos
alma en vilo siempre hacia un nuevo surgimiento
Abstracción de toda gravedad
de toda languidez
de toda geometría
de toda arquitectura
abstracción, hecha, ¡VELOCIDAD!
Movimientos de descuartizamiento y exasperación
interior más que movimientos de la marcha
movimientos de explosión, de rechazo, de
estiramiento en todos los sentidos
de atracciones malsanas, de antojos imposibles
de satisfacción de la carne golpeada en la nuca
Movimiento sin cabeza
¿De qué sirve la cabeza cuando está agobiada?
Movimientos de repliegues y enroscamientos
sobre sí mismo
y de escudos interiores
movimientos con múltiples chorros
movimientos en lugar de otros movimientos
que no se pueden mostrar, pero que habitan el espíritu
de polvos
de estrellas
de erosión
de escombros
y de inútiles latencias
Fiesta de manchas, gama de brazos
movimientos
se salta en la “nada”
esfuerzos que giran
estando solo, se es muchedumbre
¡Qué número incalculable se adelanta
agrega, se extiende, se extiende!
Adiós fatiga
adiós bípedo ahorrativo en posición de contrafuerte
quita la vaina
se es otro
cualquier otro
no se paga más tributo
una corola se abre, matriz sin fondo
La huella desde ahora tiene longitud de la esperanza
el salto tiene la altura del pensamiento
se tiene ocho patas si hay que correr
se tiene diez brazos si hay que hacer frente
se está arraigado, cuando se trata de resistir
Jamás vencido
Siempre volviendo
recién venido
mientras que apaciguado el maestro del teclado finge el sueño
Manchas
manchas para obnubilar
para desechar
para desproteger
para inestabilizar
para renacer
para tachar
para cerrar el pico a la memoria
para volver a irse
Garrote loco
boomerang que vuelve sin cesar
vuelve torrencialmente
a través de otros
para reanudar su vuelo
Gestos
gestos de la vida ignorada
de la vida
de la vida impulsiva
y dichosa hasta dilapidarse
de la vida entrecortada, espasmódica, eréctil
de la vida a la ligera de la vida no importa cómo
Gestos del desafío y de la réplica
y de la evasión fuera de los estrangulamientos
Gestos de rebasamiento
del rebasamiento
sobre todo del rebasamiento
(pre-gestos en sí, mucho más grandes que el gesto
visible y práctico que seguirá)
Enmarañamientos
ataques como zambullidas
brazadas como excavaciones
brazos como trompas
Alegría de la vida motriz
que mata la meditación del mal
no se sabe a qué reino pertenece
la hechizante hornada que surge saltando
animal u hombre
inmediato, sin pausa
ya ido
ya viene el siguiente
instantáneo
como en millares y millares de segundos
una lenta jornada se cumple
La soledad hace escalas
el desierto las multiplica
arabescos indefinidamente reiterados
Signos
no de techo, de túnica o de palacio
no de archivos y de diccionario del saber
sino de torsión, de violencia, de atropellamiento
de deseo cinético
Signos de la desbandada, de la persecución y del arrebato
de las presiones antagónicas, aberrantes, disimétricas
signos no críticos, sino de desviación con la desviación
y carrera con la carrera
signos no para una zoología
signos para la figura de los demonios desenfrenados
acompañantes de nuestros actos y contradictores de
nuestro secreto
Signos de las diez mil maneras de estar en equilibrio
en este mundo agitado que se ríe de la adaptación
Signos sobre todo para retirar su ser de la trampa
de la lengua de los otros
hecha para ganar contra ustedes, como una ruleta
bien regulada
que no le deja más que ciertos golpes felices
y la ruina y la derrota para concluir
que allí estaban inscritas
para ustedes, como para todos, de antemano
Signos no para volver atrás
sino para “atravesar la línea” mejor a cada instante
signos no como se copia
sino como se guía
o, embistiendo inconsciente, como se es guiado
Signos, no para ser entero, no para conjugar
sino para ser fiel a su “transitorio”
Signos para recobrar el don de las lenguas
la suya al menos, que, de no ser uno mismo, ¿quién la hablará?
Escritura directa al fin para el devanamiento de las formas
para el alivio, el despejo de las imágenes
cuya plaza-cerebro está en este tiempo
particularmente entorpecida
A falta de aura, dispersemos al menos nuestros efluvios.
Yantra
A Kim Chi
Colmando por la potencia del sentido
por la plenitud del rechazo, de la contracción
el reptil rígido atravesado de sonidos
Extendido, vertical
simultáneamente fuera y dentro en los cuatro puntos
cardinales
retirado
en el Infinito sin embargo
Universal sí mismo reconjugado en todo punto
Aliado a lo subterráneo, a lo sombrío
Allí donde la fuerza de sombra arremete con furia
Boca a boca lo noble y lo innoble
Imperturbado
impenetrado
en el centro del espacio axial
apartado de las atormentadoras
Descenso en el área reservada
Eliminado lo actual, lo accidental
el polvo de lo existencial
eliminado el afecto
ciego a la alteridad
investido de grandeza
de silencio
investido de inmaterialidad
de la sospechosa indefinición de las potencias oscuras
Nuevamente sumergido
Fuerza sin faz
Matriz de las formas y muralla contra las formas
En el espacio un ojo sin rostro contempla
con mirada inalterable,
sin ceder, sin párpado
sin fatiga
Llamado al orden
Llamado al retorno
Llamado a suprimir
Conciencia, las conciencias rebasadas
conciencia semejante a una invasión de lavas
Insignificantes, mil veces significantes
triángulos
sin emoción, sin acento
a los que nada distingue
delgados triángulos, vértice abajo
atraviesan triángulos, vértice abajo
atraviesan triángulos semejantes, vértice arriba
revelando al iniciado su murmurante secreto.
Aislados, ciertos colores, aparte,
dicen y no dicen
los privilegios de las cualidades.
Manchas, trazos, aquí, allá
figuras impenetrables
hablan de comienzos, de compromisos
en el remoto estelar acaso.
Sostén del mediante
en el centro un punto
solamente un punto
respondiendo a la necesidad
a la necesidad de las necesidades
a la necesidad de la esencia
de la esencia de las esencias
en el centro un punto
llama, sin traicionar
Núcleo de las llegadas
Rosa de los vientos, de los vientos del Espíritu
Círculos de la omnipresente conjunción macho-hembra
Laberintos donde se insinúan y serpentean
los imperativos trazos
del alfabeto de la lengua de los dioses
Principio sin discurso,
Principio de todo Principio
Retorno al Principio
que remite a un nivel más allá
siempre sobre la vibración de los Único
conciliado con todo en profundidad
en íntima conjunción
abrazando,
con esfuerzos para abrazar aún más ampliamente
La nube de ser se condensa
se repliega
Cosmos-Universo
cosmos del universo del “sí mismo”.
Gruesa, pesada, tosca, su materialidad
pero un hilo la une
por lo ajeno un hilo a lo ilimitado la une
hilo de llamado
donde el vacío mismo es sujetado
donde la totalidad es sujetada
donde el tiempo y el espacio indivisos son sujetados
y el Huevo original flotando sobre las olas de lo Informe
es sujetado
donde la creación y la disolución
y la interioridad es sujetada
y el diamante de su propia meditación
Saber. Saber participante
Inmensificante iluminación donde todo con todo
entra en resonancia
contemplado. Reunido.
Más allá de las geometrías, geometría
Líneas, como radiaciones aminoradas
insistentes, clarividentes
cargadas de oculto
Dibujo para regresar a lo absoluto.
Dibujo-destino
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Henri Michaux. Movimientos / Yantra. Traducción de Chiquita Gramajo y Arturo Carrera. Buenos Aires: La marca editora, 1994.
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